Ha sido una cirugía prácticamente indolora y con una recuperación visual rápida en pocos días. La verdad que digamos que es una cirugía «muy agradecida».

Me decidí por una molestia muy latosa para mí, las «moscas volantes» que entorpecían mi visión de una forma que no era capaz de tolerar. Ernesto me propuso una solución para mi problema con gran porcentaje de éxito y eficacia y decidí acometer la cirugía en ambos ojos.

Sí que es verdad que en la primera cirugía de uno de los ojos surgió una pequeña complicación que se resolvió de manera satisfactoria, en el segundo  ojo muy satisfecho de la misma. En general, es mucho mayor el beneficio obtenido que el posible riesgo/complicación de la misma.

En mi caso tenía dos opciones, aguantarme con el problema o solucionarlo a través de la cirugía. Como soy una persona que valoro mucho ver bien y muy exigente, decidí lo segundo y ahora estoy muy agradecido y contento de una visión nítida.  Y sin «moscas volantes» que me permití hacer mi vida con total normalidad y disfrutar de la buena visión que ya tenía antes de que me surgiese este «problema».

Absolutamente recomendable, sobre todo a personas que no toleran este problema, les puede causar incluso problemas de índole psicológico, que se operen y lo solucionen para volver a disfrutar de una visión nítida y de la calidad de vida que todos deseamos y no se conformen con estar así el resto de su vida. Que no se conformen con la típica frase «al final te acabas haciendo y el cerebro se adapta» sobre todo cuando no te permiten hacer las tareas cotidianas con absoluta normalidad.

Muy agradecido a Ernesto y a todo el equipo sobre todo por el trato recibido. Un trato de gran cercanía y profesionalidad que ha hecho que todo haya sido mucho más fácil.

En Insadof se respira profesionalidad y buen hacer por todos los rincones de la clínica.