Roberto Lahera Ledesma
La historia de nuestro paciente Roberto.
Este verano Ernesto conoció a Roberto que era el responsable de la seguridad de la piscina de Valdelagua. Día tras día le enseñaba su tarjeta de usuario para entrar en la piscina con su familia. Era inevitable para Ernesto, como oftalmólogo, el fijarse en el estrabismo manifiesto de Roberto.
Un día, al final del verano, Ernesto preguntó a Roberto si le molestaba de algún modo su estrabismo y si lo había revisado previamente. Era un asunto delicado ya que es una cuestión muy personal. Roberto contestó que lo había revisado antes pero nunca se había decidido a hacer nada.
Ernesto le comentó la posibilidad de examinar el estrabismo para hacer unas comprobaciones. Finalmente el Dr. Alonso le invitó a Roberto acudir a su consulta en la Clínica INSADOF, donde se comprobó que en efecto era posible la intervención quirúrgica para la corrección del problema.
Dada la cuantía del estrabismo fueron necesarias tres intervenciones quirúrgicas, pero se consiguió el resultado adecuado y la vida de Roberto ha cambiado.
Si el año que viene Roberto vuelve a la piscina, los habitantes de Valdelagua van a comprobar que tiene una nueva mirada, y está más sonriente.